El Nuevo Cartel del Boombastic: ¿Riverland para pijos ?

Una Primera Impresión Decisiva

Recientemente, se ha hecho público el nuevo cartel del festival Boombastic, que ha generado una mezcla de críticas y reflexiones en la comunidad musical. Este evento, aclamado en años anteriores, parece haber cambiado de rumbo, y muchos se preguntan si sigue siendo un punto de referencia entre la música española y latina o si se ha convertido en un festival dirigido a las modas pasajeras, eso si, su público sigue siendo el mismo, adolescentes de 14 años.

Artistas en Ascenso: ¿Fama Desmedida?

El nuevo cartel incluye a varios artistas que han alcanzado popularidad casi inesperada en los últimos meses. Algunos fanáticos han expresado que este fenómeno de 'fama rápida' ha resultado en una selección de talentos que no siempre ofrece la calidad o profundidad musical que se esperaba de eventos anteriores. La elección de estos artistas plantea interrogantes sobre el criterio de selección del festival y si realmente están alineados con su misión de ofrecer buena música. Lo que no se debería normalizar es que un artista pase de cobrar 20 euros la entrada a cobrar 90 solo por haber firmado con otra discográfica y que pijas de 15 años bailen una canción suya en TikTok llevando una capa de brillos.

¿Qué Futuro le Espera al Boombastic?

Con el enfoque en un público más joven, es comprensible que haya quienes se sientan decepcionados. El Boombastic, que solía ser un evento marcado por una diversidad musical más rica y una programación que celebraba la cultura, ahora parece estar dando un giro hacia un público que busca simplemente entretenimiento y no necesariamente conexión musical. Para muchos, esto podría significar el declive de un festival que en su día fue pasable.

Es vital que el festival escuche a su audiencia y considere las críticas constructivas que se han presentado. La música tiene la capacidad de unir a las personas de todas las edades, pero cuando un evento se dirige exclusivamente a un grupo demográfico específico, corre el riesgo de perder su esencia y relevancia. Si el Boombastic desea continuar siendo un evento destacado en el calendario musical, deberá reevaluar su dirección y encontrar un balance que respete tanto a su base de fanáticos como a las nuevas generaciones que están surgiendo en la industria.